Guía completa sobre siliconas de adición: La clave para una impresión precisa

La toma de impresiones dentales es un procedimiento esencial en odontología, ya que permite obtener un registro preciso de la anatomía bucal del paciente para la confección de prótesis, restauraciones y otros tratamientos. Un modelo de trabajo exacto es clave para asegurar la correcta adaptación de coronas, puentes, férulas o aparatos ortodóncicos. Para lograrlo, es fundamental utilizar materiales de impresión que ofrezcan una reproducción detallada, estabilidad dimensional y facilidad de manipulación. Entre los distintos materiales disponibles, las siliconas de adición han demostrado ser una gran opción debido a su precisión y fiabilidad en la toma de impresiones.

Son elastómeros que polimerizan por un proceso de adición, lo que evita la contracción del material y permite obtener una impresión fiel a la realidad. A diferencia de otros materiales dentales, las siliconas de adición ofrecen una estabilidad dimensional superior, excelente recuperación elástica y alta resistencia al desgarro, lo que facilita la remoción de la impresión sin deformaciones. Gracias a estas propiedades, este material es ampliamente utilizado en prótesis fija, implantología, ortodoncia y rehabilitación oral, donde la precisión es fundamental para el éxito del tratamiento.

Vamos a ver en profundidad qué son las siliconas de adición, sus características principales y los distintos tipos disponibles en el mercado. También analizaremos cómo se utilizan en la toma de impresiones dentales y para qué.

¿Qué es la silicona de adición y qué tipos existen?

La silicona de adición, también conocida como polivinilsiloxano (PVS), es un material de impresión de alta precisión utilizado en odontología para capturar detalles minuciosos de la anatomía bucal. Su composición química le permite polimerizar sin liberar subproductos, lo que garantiza que la impresión conserve su forma sin alteraciones a lo largo del tiempo. Gracias a su versatilidad, se adapta a distintas técnicas de impresión y se presenta en diversas consistencias, desde fluidas hasta más densas, permitiendo su uso en diferentes procedimientos clínicos. Su compatibilidad con materiales de vaciado, como el yeso y las resinas epóxicas, facilita la obtención de modelos de trabajo precisos y reproducibles.

Este material se ha convertido en la elección preferida de muchos odontólogos por su combinación de precisión, facilidad de uso y fiabilidad, lo que lo hace indispensable en la toma de impresiones para rehabilitaciones protésicas, implantología y ortodoncia.

Características de las siliconas de adición

Estas siliconas presentan una serie de propiedades que las hacen superiores a otros materiales de impresión, lo que garantiza la fidelidad de la impresión y la comodidad del paciente durante el procedimiento.

• Alta precisión y reproducción de detalles: Las siliconas de adición tienen una capacidad excepcional para captar detalles finos, llegando a reproducir estructuras de hasta 25 micras de precisión. Esto es esencial en tratamientos donde la exactitud es crucial, como en la fabricación de prótesis fija, carillas estéticas o rehabilitaciones sobre implantes.
• Estabilidad dimensional superior: A diferencia de otros materiales de impresión que pueden contraerse con el tiempo, la silicona de adición mantiene su tamaño original sin alteraciones. Esto se debe a que no libera subproductos volátiles durante la polimerización, garantizando una impresión precisa incluso después de varias horas o días.
• Excelente recuperación elástica: Este material tiene una gran capacidad para volver a su forma original después de ser deformado. Esto es crucial cuando se retira la impresión de la boca del paciente, ya que atraviesa zonas con retenciones sin sufrir alteraciones permanentes.
• Hidrofobicidad y control de humedad: Las siliconas de adición son hidrofóbicas por naturaleza, lo que significa que repelen el agua y los fluidos orales. Sin embargo, algunas formulaciones incluyen surfactantes para mejorar su mojabilidad y adaptación a los tejidos húmedos, facilitando una impresión más precisa en ambientes con saliva o sangre.
• Diferentes tiempos de trabajo y fraguado: Dependiendo de la necesidad clínica, existen siliconas de adición con tiempos de fraguado rápido o regular. Esto permite adaptar el procedimiento a la comodidad del paciente y a la complejidad del caso.
• Compatibilidad con diversos materiales de vaciado: Las impresiones de silicona de adición pueden ser vaciadas en yeso, resinas epóxicas y otros materiales sin sufrir alteraciones dimensionales. Esto garantiza una réplica fiel de la boca del paciente en el laboratorio.
• Resistencia al desgarro: Este material tiene una gran resistencia mecánica, lo que evita que se rompa al retirar la impresión o al manipularla en el laboratorio. Esto es especialmente útil en impresiones de márgenes subgingivales o en zonas con socavados marcados.

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Tipos de silicona de adición

Las siliconas de adición se pueden clasificar según su consistencia y viscosidad, lo que determina su aplicación en distintos procedimientos clínicos. Esta clasificación permite seleccionar el material más adecuado para cada caso, asegurando una impresión precisa y adaptada a las necesidades del tratamiento.

Silicona de adición liviana

• Silicona de adición liviana: Es la más fluida de las siliconas de adición, lo que le permite adaptarse con gran precisión a los detalles más finos de la preparación dental; puede ser hibrofóbica o contener surfactantes para mejorar su comportamiento en entornos húmedos. Se presenta en jeringas o cartuchos de automix para una aplicación controlada y homogénea.

Uso clínico: Se aplica en combinación con siliconas de mayor viscosidad en la técnica de doble impresión. Se inyecta sobre los dientes preparados mediante jeringas o cartuchos de automix, asegurando una reproducción precisa.

• Silicona de adición monofásica: Tiene una viscosidad intermedia entre la silicona liviana y la putty, permitiendo su aplicación tanto en la cubeta como en la boca simultáneamente; se distribuye de manera homogénea, adaptándose a las estructuras dentales sin necesidad de combinar diferentes consistencias. Se presenta en cartuchos de automix para una mezcla uniforme.

Uso clínico: Se emplea en la técnica de impresión de un solo paso, donde una única aplicación del material es suficiente para obtener la impresión definitiva.

• Silicona de adición putty: Es la más densa y viscosa de todas las siliconas de adición y tienen una gran resistencia al desgarro y estabilidad dimensional. No fluye con facilidad, por lo que se usa como material base en técnicas de impresión combinadas. Se presenta en forma de pasta (base y catalizador) que debe ser mezclada manualmente o en cartuchos de automix en algunas presentaciones modernas.

Uso clínico: Se emplea en la técnica de impresión de dos pasos, donde primero se coloca la putty en la cubeta y, una vez fraguada parcialmente, se aplica una capa de silicona liviana para capturar los detalles finos.

Comparación entre los distintos tipos de siliconas de adición

	Liviana	Monophase	Putty
Viscosidad	Baja (fluida).	Media.	Alta (muy densa).
Uso principal	Técnica de impresión de dos pasos.	Técnica de impresión de un solo paso.	Técnica de impresión de dos pasos.
Ventaja	Máxima reproducción de detalles.	Fácil de usar, reduce tiempo clínico.	Gran estabilidad dimensional y resistencia al desgarro.
Desventaja	Requiere ser combinada con otro material.	Menos detallada que la combinación de putty y liviana.	Puede ser incómoda para el paciente y necesita combinarse con liviana.

¿Cómo se utiliza y para qué sirve la silicona de adición en odontología?

Las siliconas de adición son esenciales en múltiples especialidades odontológicas. Su correcta manipulación y aplicación garantizan resultados precisos y reproducibles.

Procedimiento para la toma de impresiones con silicona de adición

La toma de impresiones dentales con silicona de adición es un procedimiento clave para obtener registros precisos de la cavidad oral del paciente. Estos registros son esenciales para la fabricación de prótesis, restauraciones, férulas o dispositivos ortodóncicos con un ajuste óptimo. Dependiendo del caso clínico y la preferencia del odontólogo, la impresión con silicona de adición se puede realizar mediante dos técnicas principales: técnica de impresión en dos pasos (Putty + Liviana) y técnica de impresión en un paso (Monophase).

Técnica de impresión en dos pasos (Putty + Liviana)

1. Preparación del paciente y selección de materiales: Se realiza una limpieza exhaustiva de la cavidad oral del paciente, asegurando que esté libre de saliva y restos de materiales que puedan afectar la impresión. Se seca cuidadosamente la zona y, si es necesario, se coloca un retractor de labios o un hilo retractor en la encía para exponer los márgenes de la preparación. Se elige una cubeta de impresión rígida y sin perforaciones para garantizar la estabilidad dimensional del material. Además, se aplica un adhesivo específico para siliconas de adición en la cubeta, extendiéndolo de manera uniforme y dejándolo secar durante el tiempo recomendado para mejorar la retención del material.
2. Mezcla y colocación de la silicona putty en la cubeta: Se toman partes iguales de la silicona putty (base y catalizador) y se mezclan manualmente hasta obtener una masa homogénea, asegurándose de que no queden vetas de color que indiquen una mezcla incompleta. Se amasa con rapidez para evitar que el proceso de fraguado comience antes de tiempo. Una vez lista, la silicona se coloca en la cubeta de manera uniforme, presionando suavemente para distribuirla sin dejar huecos ni irregularidades. La cubeta se introduce en la boca del paciente con una presión controlada para que el material se adapte correctamente a la anatomía dental y capture la forma general de la arcada.
3. Fraguado y retirada de la impresión inicial: Se mantiene la cubeta en la boca del paciente durante el tiempo de fraguado recomendado por el fabricante, evitando movimientos que puedan generar distorsiones. Una vez endurecido el material, se retira cuidadosamente la cubeta con un movimiento controlado, aplicando una ligera rotación para facilitar la extracción sin generar presión excesiva sobre los tejidos. La impresión se inspecciona visualmente para verificar que se haya registrado correctamente la estructura dental y que no haya imperfecciones graves que requieran repetir el procedimiento.
4. Preparación de la impresión para la segunda fase: Se examina la impresión de putty y, si es necesario, se recortan zonas internas para generar un espacio adecuado para la silicona liviana. Se lava con agua para eliminar residuos y se seca completamente antes de proceder con la siguiente fase. Este paso es crucial para evitar la presencia de contaminantes que puedan interferir en la adhesión entre ambas siliconas y comprometer la precisión del registro.
5. Aplicación de la silicona liviana y reimpresión: Se inyecta la silicona liviana sobre los dientes preparados con ayuda de una jeringa, asegurando que el material fluya correctamente y cubra todos los detalles anatómicos sin generar burbujas. Al mismo tiempo, se rellena la impresión de putty con silicona liviana para que ambas capas se integren correctamente. La cubeta se reposiciona en la boca con una presión ligera y uniforme, permitiendo que la silicona liviana se distribuya de manera óptima y capture los detalles finos de la superficie dental.
6. Fraguado y retiro de la impresión final: Se deja fraguar la silicona liviana según el tiempo recomendado por el fabricante, sin que el paciente realice movimientos que puedan comprometer la estabilidad del material. Una vez transcurrido el tiempo de fraguado, se retira la impresión cuidadosamente con un movimiento de desalojo progresivo para evitar deformaciones. Se examina la impresión final para verificar que los márgenes y estructuras anatómicas han sido capturados con precisión, asegurando que no haya presencia de burbujas, zonas faltantes o defectos que puedan afectar la calidad del modelo de trabajo.

Técnica de impresión en un paso (Monophase)

1. Preparación del paciente y selección de materiales: Se inicia asegurando que la cavidad oral del paciente esté limpia y seca para evitar interferencias con la adhesión del material. Se selecciona una cubeta de impresión adecuada, la cual puede ser perforada o rígida, dependiendo de la preferencia del profesional. Antes de colocar la silicona, se aplica un adhesivo específico en la cubeta y se deja secar, garantizando una mejor retención del material durante la impresión.
2. Mezcla y carga de la silicona en la cubeta: La silicona monofásica se presenta en cartuchos de automix, lo que facilita su dispensación y garantiza la proporción exacta de los componentes. Se carga la cubeta con una cantidad suficiente de material, distribuyéndolo de manera uniforme para asegurar una correcta adaptación en la boca del paciente. Su consistencia intermedia permite que el material funcione tanto como soporte estructural como para capturar detalles finos de la anatomía dental.
3. Aplicación de la silicona en la boca del paciente: Antes de colocar la cubeta en la boca, se inyecta una pequeña cantidad de silicona monofásica directamente sobre los dientes preparados mediante una jeringa intraoral. Este paso es crucial para asegurar que el material fluya correctamente y cubra los márgenes sin generar burbujas ni defectos. Posteriormente, la cubeta cargada con silicona se asienta en la boca con una presión controlada y uniforme, permitiendo que el material se distribuya de manera óptima alrededor de las estructuras anatómicas.
4. Fraguado y endurecimiento de la silicona: Una vez posicionada la cubeta, se espera el tiempo de fraguado recomendado por el fabricante sin que el paciente realice movimientos mandibulares. Durante este período, la silicona monofásica conserva su fluidez suficiente para capturar detalles, pero también mantiene la estabilidad necesaria para evitar distorsiones. Su formulación equilibrada garantiza que, al endurecerse, se logre un modelo fiel a la realidad sin sufrir contracción o alteraciones dimensionales.
5. Retiro de la impresión y evaluación de la calidad: Tras el tiempo de fraguado, la impresión se retira cuidadosamente con un movimiento progresivo, asegurando que se mantenga la integridad del material y se eviten deformaciones. Se inspecciona la impresión detenidamente para verificar que los márgenes, las superficies dentales y las estructuras anatómicas han sido registradas con precisión. Se comprueba la ausencia de burbujas, distorsiones o zonas defectuosas antes de proceder al envío de la impresión al laboratorio para la confección de la restauración o aparato requerido.

Aplicaciones de la silicona de adición en odontología

La silicona de adición es un material ampliamente utilizado en diversas especialidades odontológicas debido a su precisión y estabilidad dimensional. Sus aplicaciones más importantes incluyen:

• Prótesis fija y removible: En la rehabilitación oral, la silicona de adición se emplea para la toma de impresiones de dientes preparados para coronas, puentes e incrustaciones. Su capacidad para captar detalles finos y su mínima deformación garantizan la fabricación de prótesis con un ajuste preciso, mejorando la adaptación marginal y la funcionalidad de las restauraciones. También se usa en la confección de prótesis removibles, permitiendo obtener modelos exactos de la arcada edéntula o parcialmente edéntula.
• Implantología: En tratamientos con implantes dentales, la silicona de adición permite obtener registros precisos de la posición tridimensional de los implantes, asegurando que las estructuras protésicas diseñadas en laboratorio encajen perfectamente. Su estabilidad dimensional es clave para evitar discrepancias en la colocación de pilares y prótesis sobre implantes.
• Ortodoncia: Se usa para la toma de modelos de estudio antes y después del tratamiento, permitiendo analizar la evolución de la alineación dental. También es útil para la confección de alineadores transparentes y aparatos ortodóncicos personalizados.
• Rehabilitación oral y oclusión: Se emplea para registros de mordida en tratamientos de rehabilitación oral, permitiendo un adecuado diagnóstico y planificación de la oclusión. Su capacidad para capturar detalles sin distorsión ayuda a los técnicos de laboratorio a fabricar férulas oclusales y dispositivos para trastornos de la ATM con máxima precisión.
• Odontología digital y CAD/CAM: En combinación con escáneres intraorales, la silicona de adición sigue desempeñando un papel importante en la odontología digital. Muchas clínicas utilizan impresiones de silicona para luego digitalizarlas y fabricar prótesis mediante tecnología CAD/CAM, combinando la exactitud del material con la eficiencia del diseño asistido por computadora.
• Odontopediatría: En niños, la silicona de adición es útil en la confección de mantenedores de espacio y aparatos interceptivos, ya que permite obtener impresiones rápidas y precisas sin causar incomodidad al paciente. Su elasticidad y facilidad de manipulación la hacen ideal en este ámbito.

La silicona de adición se ha consolidado como el material de elección para la toma de impresiones en odontología debido a su alta precisión, estabilidad dimensional y resistencia al desgarro. Su capacidad para reproducir detalles minuciosos sin sufrir deformaciones la hace indispensable en especialidades como prótesis, implantología y ortodoncia, donde la exactitud de los modelos de trabajo es clave para el éxito del tratamiento. Además, su versatilidad permite su uso en diferentes técnicas de impresión, adaptándose a las necesidades de cada procedimiento y mejorando la eficiencia clínica.

El avance en la formulación de siliconas de adición ha permitido optimizar su manipulación y aplicación, ofreciendo tiempos de trabajo adecuados y presentación en sistemas de mezcla automática que facilitan su uso en la práctica diaria. Su compatibilidad con la odontología digital también la mantiene como un material relevante en la evolución de las técnicas restauradoras. Gracias a su estabilidad y fiabilidad, las impresiones obtenidas con silicona de adición minimizan errores y retrabajos, asegurando impresiones bien adaptadas y un mejor pronóstico a largo plazo para los pacientes.

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