En el mundo de la odontología estética, el blanqueamiento dental se ha consolidado como uno de los tratamientos más solicitados para realzar la belleza de la sonrisa. Más allá de la salud bucal, la estética dental busca ofrecer una apariencia luminosa que refleje confianza y bienestar. Sin embargo, factores como el paso del tiempo, el consumo de ciertos alimentos y bebidas, el tabaquismo y el proceso natural de envejecimiento pueden oscurecer los dientes y generar manchas, afectando no solo la armonía de la sonrisa, sino también la autoestima y seguridad personal.
Para contrarrestar estos efectos, los profesionales han desarrollado y perfeccionado diversas técnicas que permiten restaurar la blancura natural de los dientes. Entre ellas, destacan los tratamientos con agentes blanqueadores avanzados, capaces de descomponer las moléculas responsables de la decoloración y devolver un tono más uniforme y brillante.
Hoy en día, el blanqueamiento dental no solo es una solución estética, sino también una tratamiento clave para atraer pacientes a las clínicas odontológicas. La creciente demanda por sonrisas más blancas convierte este método en una excelente oportunidad para captar nuevos pacientes y fomentar el interés en otros cuidados dentales.
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En este articulo, ofreceremos una guía detallada sobre el blanqueamiento dental, abordando en profundidad su definición, los distintos tipos de procedimientos disponibles, las características de los principales métodos y sus respectivas ventajas y desventajas.
Por que se oscurecen los dientes?
En ocasiones, los dientes pueden oscurecerse o presentar manchas por diferentes motivos. Las causas pueden ser el propio paso del tiempo u otras que tienen que ver con hábitos poco saludables para nuestros dientes como fumar, consumir bebidas azucaradas y/o ácidas y por el abuso de alimentos de pigmentación fuerte como el café, té o vino tinto.
Un blanqueamiento dental puede hacerse a todas las personas que hayan superado la adolescencia y a aquellas que no sufran ninguna patología compatible con esta intervención.
Consideraciones previas
Antes de comenzar nuestro blanqueamiento, es importante tener en cuenta algunas consideraciones previas para determinar el tipo de procedimiento que nuestro paciente necesita:
- Explicarle en qué consiste el tratamiento: La comunicación es clave para crearle un contexto seguro al paciente y que este se familiarice con todo el proceso.
- Limpieza y diagnóstico bucodental: Antes de comenzar el blanqueamiento es muy importante realizar una limpieza profunda, siempre profilaxis y verificar que la cavidad oral esté sana.
- Determinar el color del diente: Esto es importante para escoger el tipo de gel que debemos utilizar y su concentración. Para simplificar esta tarea, disponemos en nuestro catálogo del Espectrofotómetro con Luz LED VITA que nos da una determinación precisa y reproducible del color dental en segundos.
- Escoger los materiales con los que vamos a tratar a nuestro paciente. ¿Utilizo peróxido de hidrógeno, peróxido de carbamida o hidroxiapatita? Sigue leyendo...
¿Qué es el blanqueamiento dental y como funciona?
El tratamiento de aclarado dental es un procedimiento químico diseñado para eliminar manchas y pigmentaciones que afectan el color natural de los dientes. El mecanismo de acción se basa en la liberación de oxígeno activo, el cual penetra la estructura dental y descompone los compuestos responsables del oscurecimiento.
Este procedimiento puede realizarse mediante diversas técnicas, adaptadas a las necesidades específicas de cada paciente. Algunos tratamientos se llevan a cabo exclusivamente en el consultorio odontológico, mientras que otros pueden aplicarse en casa utilizando férulas personalizadas con gel blanqueador, siempre bajo la indicación y supervisión del odontólogo tratante.
Para lograr resultados óptimos y seguros, es fundamental conocer la composición y el modo de acción de los productos blanqueadores.
Agentes utilizados en el blanqueamiento dental y sus diferencias
Entre los agentes más utilizados en odontología para aclarar los dientes se encuentran el peróxido de hidrógeno, el peróxido de carbamida y, más recientemente, la hidroxiapatita, cada uno con características y aplicaciones específicas. La principal diferencia entre ellos radica en su composición, mecanismo de acción, velocidad de efecto y estabilidad, lo que influye en su uso en distintos tipos de tratamientos.
Mientras que los peróxidos actúan liberando oxígeno para descomponer las moléculas de pigmentación en los dientes, la hidroxiapatita ofrece un enfoque más suave y biocompatible, rellenando microfisuras en el esmalte y proporcionando un efecto óptico de mayor blancura sin causar sensibilidad.
A continuación, te detallo las características y mecanismos de acción de cada uno en el blanqueamiento dental:
- Peróxido de Hidrogeno: El peróxido de hidrógeno es un agente aclarador de acción rápida que libera oxígeno para descomponer las moléculas de pigmentación responsables del oscurecimiento dental. Se usa principalmente en tratamientos profesionales, donde el odontólogo controla su aplicación de manera segura. Su alta potencia permite obtener resultados visibles inmediatos, pero puede causar sensibilidad temporal. La concentración varía según el tipo de procedimiento, alcanzando hasta un 40% en consultorio, mientras que en tratamientos caseros se emplea en porcentajes más bajos, generalmente entre el 3% y el 10%.
- Peróxido de Carbamida: Su acción es más pausada, ya que libera oxígeno de manera gradual, lo que permite un proceso de aclaramiento más controlado y progresivo. Gracias a esta liberación lenta, el riesgo de sensibilidad dental se reduce considerablemente, lo que lo convierte en una alternativa favorable en casos donde se busca minimizar la sensibilidad dental. Es especialmente utilizado para los tratamientos en casa, aplicándose a través de férulas personalizadas durante un periodo prolongado para lograr resultados efectivos y duraderos.
- Hidroxiapatita: Es un mineral de fosfato de calcio componente principal del esmalte dental y la dentina. Su aplicación en tratamientos de blanqueamiento ayuda a mejorar el color de los dientes sin recurrir a agentes agresivos. No altera la pigmentación interna del diente, como lo hacen los peróxidos, sino que rellena microfisuras y refuerza la estructura del esmalte, proporcionando un efecto óptico de mayor blancura y brillo. Además de su capacidad para mejorar la estética dental, este mineral tiene una función clave en la remineralización del esmalte, protegiéndolo del desgaste y reduciendo la sensibilidad. Este compuesto se emplea en formulaciones de pastas dentales, enjuagues y protocolos clínicos de remineralización.
Si quieres conocer aún más las diferencias de estos agentes blanqueadores, te recomendamos que leas el artículo
Diferencias entre blanqueamientos dentales con Peróxido de Hidrógeno y Peróxido de Carbamida¿Cuáles son los tipos de blanqueamiento dental y como se realizan?
Los procedimientos de blanqueamiento dental pueden realizarse de distintas maneras, y la selección del método adecuado dependerá de la evaluación clínica, el diagnóstico y las necesidades del paciente. Se dispone de múltiples enfoques terapéuticos para la reducción de pigmentaciones extrínsecas e intrínsecas, cada una con beneficios particulares:
Blanqueamiento dental en clínica
Este procedimiento se lleva a cabo en el consultorio odontológico bajo estricta supervisión profesional y es el método más rápido y efectivo. Generalmente, se utilizan agentes blanqueadores a base de peróxidos en altas concentraciones, activados por fuentes de luz como LED o láser y normalmente, en una o dos sesiones, los dientes pueden aclararse varios tonos. Proporciona resultados inmediatos con una alta estabilidad del color a largo plazo, además de contar con la supervisión profesional para controlar efectos adversos como hipersensibilidad transitoria o irritación gingival.
Procedimiento:
- Valoración clínica inicial: El dentista examina la salud bucal y realiza una limpieza dental.
- Aislamiento de tejidos blandos: Se aplica un gel protector en encías y labios.
- Colocación del agente blanqueador: Se usa peróxido de hidrógeno (30%-40%).
- Fotoactivación del gel con LED o láser: Se expone el gel a luz especial para acelerar el proceso.
- Remoción del agente y enjuague bucal: Se limpia el gel blanqueador y se enjuaga la boca.
- Refuerzo terapéutico en sesiones posteriores si es necesario: Puede requerir varias aplicaciones en la misma cita o en sesiones posteriores.
- Modificación de la tonalidad dentaria: Se ven inmediatamente y pueden aclarar entre 4 y 8 tonos en una sola sesión.
Al finalizar el blanqueamiento con peróxido, se aplica un gel o pasta que contiene hidroxiapatita. Este compuesto se adhiere al esmalte y penetra en las microfisuras del diente, ayudando a remineralizarlo y a rellenar las pequeñas imperfecciones causadas por el blanqueamiento. La hidroxiapatita también actúa como un agente que otorga un brillo óptico, mejorando la estética final sin alterar la estructura del diente.
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El tratamiento ambulatorio se lleva a cabo bajo la supervisión del odontólogo, quien establece el protocolo adecuado para cada caso. Se confeccionan férulas termoplásticas personalizadas para garantizar una distribución homogénea del agente blanqueador, el cual se emplea en concentraciones reducidas para una liberación gradual del peróxido que debe aplicarse a diario durante el período indicado por el odontólogo, según las necesidades de cada paciente. Este método permite un control progresivo del blanqueamiento y reduce la posibilidad de sensibilidad dental, favoreciendo un aclaramiento progresivo con menor incidencia de hipersensibilidad.
Procedimiento:
- Se indica el uso de una férula termoformada a medida.
- Se administra peróxido de carbamida (10%-20%) o peróxido de hidrógeno (3%-10%), según el protocolo establecido.
- El tiempo de aplicación varía según la concentración del agente y las características del paciente.
- Los resultados se obtienen de manera gradual en comparación con el blanqueamiento en consultorio.
Blanqueamiento combinado
La técnica de este tratamiento consiste en la combinación de un blanqueamiento en consultorio con una fase ambulatoria supervisada, optimizando los resultados a corto y largo plazo. Este método permite obtener un aclarado dental más efectivo y duradero al aprovechar los beneficios de ambos procedimientos.
En la primera fase, realizada en la clínica, se emplea peróxido de hidrógeno en altas concentraciones (25-40%), activado mediante fuentes de luz como LED o láser, para inducir un aclaramiento dental inmediato. En la fase ambulatoria, se indica el uso de férulas termoformadas con peróxido de carbamida en concentraciones de 10-22%, permitiendo una liberación progresiva del agente blanqueador, lo que permite un aclarado progresivo y controlado.
Adicionalmente, el uso de hidroxiapatita en pastas o geles remineralizantes puede ser recomendado para fortalecer el esmalte y proporcionar un efecto óptico de mayor blancura sin riesgo de sensibilidad.
Este protocolo potencia la eficacia del aclaramiento, minimiza la hipersensibilidad dentaria y favorece una estabilidad cromática prolongada.
Blanqueamiento interno para dientes no vitales
El aclaramiento de dientes no vitales es un procedimiento diseñado específicamente para aquellos dientes que han perdido su vitalidad, generalmente debido a traumatismos, caries profundas o tratamientos de conducto. A diferencia de los dientes vitales, cuya pigmentación se puede reducir mediante agentes aplicados en la superficie, en estos casos el oscurecimiento ocurre desde el interior, por lo que se requiere un enfoque diferente para lograr un tono más uniforme.
El blanqueamiento interno implica la aplicación de agentes aclaradores en la cámara pulpar de dientes tratados endodónticamente y se desarrolla en varias etapas:
- El odontólogo revisa el estado del diente mediante radiografías para asegurarse de que la endodoncia esté bien sellada y sin infecciones. Después, se aísla el diente para evitar que el agente químico afecte los tejidos circundantes.
- Se introduce un agente aclarador en la cámara pulpar, usualmente peróxido de hidrógeno (30-35%) o perborato de sodio, dependiendo del protocolo clínico y del grado de pigmentación.
- Se coloca un sellado provisional y se deja actuar el agente durante algunos días. Dependiendo del grado de pigmentación, puede ser necesario repetir el procedimiento en varias sesiones hasta alcanzar el tono deseado siempre a criterio del profesional.
- En la fase final, se elimina el agente blanqueador y se procede al sellado definitivo con materiales restauradores biocompatibles.
Blanqueamiento de compra libre
Existen diversas opciones para este tipo de blanqueamiento, como pastas dentales blanqueadoras, tiras adhesivas con peróxido o enjuagues. Estos productos son más accesibles y económicos, pero su eficacia es limitada en comparación con los tratamientos profesionales. Son ideales para el mantenimiento de los resultados de procedimientos previos. Sin embargo, es fundamental usarlos con precaución, ya que un empleo excesivo o inadecuado podría afectar el esmalte dental.
¿Cuanto duran los efectos del blanqueamiento y que precauciones tomar?
La duración de los efectos del blanqueamiento dental varía según el tipo de tratamiento y los hábitos del paciente. El blanqueamiento dental realizado en clínica ofrece resultados que suelen durar entre 1 y 3 años mientras que el blanqueamiento en casa generalmente tiene una duración más corta, con efectos que varían entre 6 meses y 1 año.
La prolongación de los resultados del blanqueamiento dental consiste en la aplicación de medidas preventivas y de mantenimiento para conservar el tono alcanzado tras el tratamiento. Esto incluye evitar alimentos y bebidas pigmentadas como café, té, vino tinto y tabaco, así como mantener una adecuada higiene oral mediante el uso de pastas y enjuagues blanqueadores. Además, se recomienda cepillarse los dientes después de consumir alimentos que puedan causar manchas y realizar retoques periódicos con férulas o tratamientos supervisados por un odontólogo cada 6 a 12 meses.
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Aspectos positivos y negativos del blanqueamiento dental
Este procedimiento ofrece múltiples beneficios estéticos y emocionales, aunque también conlleva algunas consideraciones que deben evaluarse antes de su realización. A continuación, te detallo algunas de las principales:
Ventajas
- Mejora la estética inmediata proporcionando una sonrisa más blanca, brillante y juvenil.
- Es un tratamiento no invasivo a diferencia de otros procedimientos dentales, como las carillas o coronas.
- Genera resultados inmediatos y efectivos, particularmente en tratamientos realizados en consultorio.
- Permite adaptar el tratamiento a las necesidades y preferencias del paciente.
- Existen variedad de opciones para diferentes métodos.
- Aumenta la confianza y autoestima.
- Rápida recuperación y mínimos efectos secundarios.
Desventajas
- Una de las desventajas más comunes del blanqueamiento dental es la sensibilidad dental.
- El contacto de los agentes blanqueadores con las encías puede causar irritación o inflamación temporal.
- Si el tratamiento no se realiza correctamente bajo supervisión medica, los productos blanqueadores pueden contribuir al desgaste del esmalte dental.
- No es efectivo en todos los tipos de manchas.
- No tiene efecto sobre restauraciones dentales como coronas, empastes, carillas o puentes.
- No son permanentes y pueden requerir tratamientos de mantenimiento periódicos.
Para reducir los efectos secundarios del blanqueamiento dental, especialmente la sensibilidad dental, incluir desenbilizantes dentales en el proceso de blanqueamiento puede ser clave para garantizar una experiencia sin molestias y con mejores resultados.
Estos productos actúan formando una capa protectora sobre la superficie del diente y bloqueando los túbulos dentinarios, que son los conductos que transmiten las sensaciones de frío, calor y presión al nervio del diente. Al bloquear estos túbulos, se reduce la sensibilidad dental y se minimiza la incomodidad.
Si quieres saber más sobre este tema en profundidad, te recomendamos que leas nuestro post
Todo lo que necesitas saber sobre los Desensibilizantes Dentales¿Para quién no es apto el blanqueamiento dental?
La despigmentación dental es un tratamiento seguro para muchas personas, sin embargo no es adecuado para todos. Existen varias contraindicaciones que deben tenerse en cuenta antes de someterse a este procedimiento. A continuación, te menciono algunas de las principales:
- Embarazo y Lactancia: Las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deben evitar el blanqueamiento dental debido a los posibles riesgos para el bebé.
- Niños y adolescentes: No se recomienda el blanqueamiento dental en personas menores de 16 años, ya que los dientes aún están en desarrollo.
- Sensibilidad dental excesiva: Las personas con dientes extremadamente sensibles pueden experimentar mayor incomodidad durante y después del tratamiento.
- Problemas de encías: Si tienes encías inflamadas, sangrantes o enfermedades periodontales, el blanqueamiento dental puede empeorar la condición de tus encías o provocar irritación.
- Restauraciones dentales: El blanqueamiento no afecta a los dientes postizos, coronas, fundas o rellenos. Estos pueden necesitar ser reemplazados por otros de color más claro para mantener la uniformidad.
- Dientes con caries o daño estructural: Si tus dientes tienen caries o estructuras debilitadas, el blanqueamiento puede agravar estos problemas, ya que los productos blanqueadores pueden penetrar y afectar las zonas afectadas, lo que puede causar sensibilidad o daño adicional.
- Trastornos dentales o sistémicos: Algunas condiciones médicas, como problemas hormonales o trastornos del esmalte dental (por ejemplo, la amelogénesis imperfecta), tienen una estructura comprometida lo que puede causar una mayor sensibilidad o incluso daño adicional.
Por último, te dejamos este video con los mejores tips y preguntas frecuentes acerca de blanqueamientos dentales de la mano de Alberto Rueda, representante de Ultradent.
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